Azkena Rock Festival 2016
17-18/06/2015, Recinto Mendizzabala, Vitoria-Gasteiz
Fotos Musicsnapper y Rhythm And Photos
Los augurios eran oscuros y se confirmaron. Sobre el cielo vitoriano se cernieron grandes nubes anunciando lluvias inclementes. Las primeras horas del Azkena Rock Festival las vivimos pasadas por agua. Una lluvia sin compasión que caló a los menos preparados pero que no consiguió vencer a la música. Mientras gran parte del público se resguardaba bajo las carpas acondicionadas para la ocasión, algunos temerarios se aproximaban a las primeras filas de los escenarios. El chubasquero se convirtió así en el imprescindible compañero de festival durante las primeras horas. The London Souls y Jared James Nichols sufrieron el efecto de la lluvia.
Aún así consiguieron calentar motores para los siguientes conciertos. Imposible no emocionarse escuchando a un Daniel Romano adylanado, estrenando nuevo y excelente disco, “Mosey”. En estado de gracia absoluto. Ojalá vuelva a una sala pronto para presentarlo y podamos disfrutarlo sin la fría lluvia calándonos hasta los huesos.
La energía de Vintage Trouble empezó a desatar al personal que resistía estoicamente las inclemencias del tiempo. Pero no fue hasta que la gran Lucinda pisó el escenario cuando el cielo nos dio la tregua que todos deseábamos. Sólo la música de esta trovadora consiguió calmar al dios de la lluvia. Alegre, divertida, nunca antes la habíamos visto disfrutar tanto sobre un escenario. Los primeros momentos le costó arrancar, siempre le pasa, pero una vez encontró su camino ofreció un concierto espléndido y en crescendo. Lucinda Williams es historia viva del rock y lo demostró en su actuación en el escenario principal del Azkena Rock Festival. Creciéndose por momentos, canción a canción, verso a verso, hasta hacerse inmensa. Una de las pocas presencias femeninas del festival, pero menuda presencia. Su explosivo “Rockin' in the free world” llevaba un pequeño trozo de Neil Young al Azkena, un artista que otro año más se les escapaba.
Muchos se sorprendieron de la potencia de Blackberry Smoke, su impresionante directo hizo despegar por fin a la mayoría del público que parecía atenazado por el remojo que habíamos sufrido durante horas. Su rock sureño es garantía de calidad. Perfecta puesta a punto para el cabeza de cartel del viernes. The Hellacopters volvían para celebrar el 20 aniversario de “Supershitty to the Max!”. Por suerte para nosotros y desgracia para el cantante de Primal Scream que cayeron del cartel del Azkena tras su accidente. Dejaron paso así a un grupo más adecuado para un festival como el Azkena que los de Bobby Gillespie. Aunque esta celebración de uno de los discos imprescindibles de Hellacopters se vio empañada por un sonido flojo, con un público gritando “más volumen, más volumen” y con la sensación de estar viendo uno de esos conciertos que te tienen que volar la cabeza pero no lo hacen, no por culpa de la banda que hizo un concierto espectacular, sino por un sonido que no acompañaba. Algo que un festival como el Azkena no se puede permitir. Muchos salieron muy cabreados del concierto y con razón. Costó entrar en el mismo pero una vez dentro volvimos a constatar porque The Hellacopters fueron y serán una de las grandes bandas de nuestro tiempo.
La decepción continuó en los primeros temas de otra leyenda, Danzig. Tantos años esperando e hizo salir huyendo a muchos de los asistentes. Era terrible verlo sufrir sobre el escenario. No está en forma y se nota. Una lástima. Así que partimos de la oscuridad al blues de Luke Winslow-King que con su banda ofreció otro de los conciertos del día. Volvería a repetirlo el sábado siguiente en la plaza de la Virgen Blanca. Gran músico y gran banda de apoyo, que saben lo que es dar espectáculo y buena música. Imprescindible.
La noche se cerraba con Gutterdämmerung. Película de rock and roll y concierto al mismo tiempo. Con guión ideado por Henry Rollins y la participación de la plana mayor del rock: Lemmy, Iggy Pop, Josh Homme, Mark Lanegan y el propio Rollins, entre otros. La película se emitía mientras la banda tocaba detrás de la pantalla y algunos de sus personajes aparecían ante ella en carne y hueso. En especial, Mr. Rollins que ataviado con ropajes de cura nos ofreció uno de sus perfiles más serios. Lástima que su presencia se limitara a hablar sobre el diálogo de su personaje en pantalla, mejor que le hubieran quitado el sonido a la película las veces que salió. Aún así, es un concepto interesante, diferente y atractivo para cerrar un festival. Aunque se disfrutaría más en una sala de teatro o cine. La banda tocaba grandes clásico del rock, con un Jesse Smith como cantante versátil para cantar temas diferentes. Buen trabajo de apoyo a la película dedicada por Henry Rollins al desaparecido Lemmy. Cerraron con un emotivo “Ace of Spades” coreado por todo el público. Lo hacían en el escenario principal dedicado precisamente al cantante de Motörhead. Cerrábamos la primera jornada, con algunos aciertos, alguna decepción, mucha lluvia y cansancio pero aún nos quedaba un día enorme por delante. Los Who nos esperaban.
El sábado por la mañana Luke Winslow-King llenaba hasta la bandera la plaza de la Virgen Blanca, llevando la música del Azkena a las calles de Vitoria-Gasteiz. Perfecta elección para un mediodía festivo y de preparación para la segunda jornada del festival. Ni siquiera el chaparrón que cayó justo antes de su actuación consiguió empañar el comienzo de un día prometedor. Se notaba que la ciudad empezaba a llenarse mucho más, los Who eran suficiente motivo para el desplazamiento.
The Vintage Caravan ofrecían en el escenario pequeño, dedicado a Scott Weiland, un potente show. Los islandeses saben lo que es combinar a la perfección blues rock y psicodelia con una energía desbordada y una juventud apabullante. Estarían más tarde entre el público disfrutando como niños del show de los Who. Radio Birdman tomaron el relevo en el escenario David Bowie en otro de los grandes conciertos del festival. Los australianos tienen un directo sólido y demoledor, demostrando que se puede envejecer y mantener el tipo. Algunos deberían tomar nota. Salieron a matar y no dejaron supervivientes.
Lección de sabiduría musical que incomprensiblemente coincidía en horario con el otro grupo australiano del festival, The Scientists. Para poder disfrutar de ellos había que abandonar a medio concierto de Radio Birdman. Mereció la pena. Kim Salmon demostró que es toda una leyenda. Genio y figura sobre el escenario con un directo arrollador y furioso, no apto para cardíacos. Llegó, vio y venció. Supo a poco, esperemos que vuelvan de gira por salas, tanto la banda como Salmon en solitario, presentando su último e interesante trabajo “My Script”.
Ya en el escenario principal, Imelda May demostró su poderío con un show más sobrio pero más elegante. Con una banda de apoyo que le permitía lucirse, Imelda conquistó al público del Azkena de nuevo. Faltaba poco para el gran momento. Muchos cogían sitio más de una hora antes para la actuación más esperada del festival. La emoción se sentía en el ambiente. The Who saltaban al escenario y lo hacían en plena forma. Directo apabullante que pudimos disfrutar sin problemas de sonido, por suerte, si se hubiera repetido el sonido bajo del viernes hubiera sido imperdonable. Pero no fue así, todo fue perfecto, tanto Roger Daltrey como Pete Townshend volvieron a demostrar que son leyenda viva de la historia de la música. Clásico tras clásico, fueron tocando sus grandes éxitos consiguiendo enloquecer a un público rendido a sus pies desde los primeros acordes. Sonaron “I Can’t Explain”, “Substitute”, “Who Are You”, “The Kids Are Alright” o “My Generation”. Elevando la temperatura del frío vitoriano, tras las primeras descargas sónicas llegó el momento para algunos de los temas de “Quadrophenia” y “Tommy”. Prueba palpable del talento compositivo de Mr. Townshend. Por supuesto no podían faltar la impresionante “Baba O’Riley” y una explosiva “Won’t Get Fooled Again”. Tanto los dos miembros supervivientes como la excelente banda de apoyo con un Pino Palladino y un Zak Starkey certeros e impresionantes ofrecieron un concierto histórico. Daltrey agradecía a su compañero haber creado la música que les ha dado la gloria. Muchos abandonaron el festival tras su concierto, era imposible superar algo así. Maestros. Nos quitamos el sombrero, siguen siendo grandes.
Para los que decidieron quedarse podían disfrutar del espectacular directo de Refused. Una de las sorpresas del festival que seguramente muchos se perdieron. A destacar a Dennis Lyxzen, frontman absoluto de la banda, desbocado y pletórico. Otro acierto del festival. Mientras Marky Ramone rescataba viejas glorias acompañado por Ken Stringfellow a las voces. Cerraba el festival Supersuckers para aquellos que aún aguantaban a altas horas de la noche. Y recuperábamos la fe en un festival que ha mejorado en los últimos años tras alguna que otra decepción. Así si nos gusta el Azkena. Volveremos el año que viene, sin duda.

Anabel Vélez
La música, el cine y los libros son sus tres grandes pasiones así que dirigió sus pasos como periodista hacia ese camino. Hace más de diez años que escribe, disfruta y vive la cultura. Por eso habrás leído sus artículos en revistas musicales como Ruta 66 y Ritmos del Mundo o cinematográficas como Cineasia. También la habrás escuchado en Ràdio Gramenet haciendo programas de cine y música en el pasado, ahora lo puedes hacer como colaboradora del programa musical El Click de Ràdio Montornès. Colabora habitualmente en páginas web como Sonicwave Magazine o Culturaca y siempre, siempre escucha música.
Artículos relacionados (por etiqueta)
- Cartel definitivo del Azkena Rock Festival 2020
- Azkena Rock Festival 2019
- Azkena Rock Festival 2019 al completo
- Azkena Rock Festival 2018
- Azkena Rock Festival 2018 completa su cartel
- Azkena Rock Festival 2017
- Calentando motores para el Azkena 2017
- Azkena Rock Festival 2015
- AGENDA 20/06 – 26/06
- Ya hay fechas para el Azkena Rock Festival