NBA - Abril 2016
El base puro
Fotos: NBA
Ha llegado un punto, en el que casi no se le da valor al hecho de jugar en la NBA, incluso hay jugadores que declinan la oferta, como es el caso reciente de Sergi Llull, pero cabe recordar que cuando Pau Gasol ingresó en la liga, antes sólo había logrado ese billete Fernando Martín. Por lo tanto, que Raül López fuese escogido por Jerry Sloan como sustituto natural de John Stockton (quizás el mejor base clásico de la historia) tuvo que ser una de las noticias más notables y sonadas en la historia de nuestro baloncesto.
De aquel equipo que maravilló al mundo en Lisboa ganando el Mundial Junior en 1999, ese chico menudo y reservado criado en Vic (y en Badalona con una pelota de baloncesto en las manos) era la estrella que más brillaba, la que tenía más futuro. Hábil, rápido, y sobre todo, muy inteligente en la pista, no le temblaban las piernas, en parte, gracias a una cabeza privilegiada que le permitió superar graves lesiones en sus rodillas y dar marcha atrás a su aventura americana cuando vio que su físico no daba para más, necesitaba un ritmo de competición óptimo a sus circunstancias. Si bien, su juego si dejó huella allí, de no ser por ese handicap, hubiese hecho carrera, como el bueno de Tony Parker con el que compartía generación y puesto en la cancha. Una vez estuvo de vuelta, varios destinos, de Girona y aquél proyecto fugaz a Madrid (en dos etapas), el Khimki ruso o una última parada en Bilbao, un lugar en el que se ha sentido a gusto formando parte de los hombres de negro con dos amigos que lo son para toda la vida, Alex Mumbrú y Alex Hervelle. Juntos han superado malos tiempos (para la lírica y para el baloncesto), han vivido un sueño, el suyo y el de mucha gente que les ha apoyado cuando esa aventura no se podía financiar. Raül López es un valiente, e incluso, cuando nadie pensaba que pasaría debido a la acumulación de grandes bases que había en España, tuvo un retorno dulce a la selección: como botín un oro europeo y una plata olímpica. Dejó su sello como jugador, y por lo que nos llega, también como persona. Una fortuna haberle disfrutado, con sus cabriolas y su temple, tenía un talento innato para jugar a esto, en Utah seguro que aún le recuerdan.
En cuanto a la competición pura, los play-offs están a la vuelta de esquina esperando a ver si Golden State Warriors pulverizan o no el record de los Bulls. Pase lo que pase, Michael Jordan estará contento, sus Hornets por fin funcionan tras tener mucha paciencia con técnicos y jugadores, únicamente dos presencias en las rondas finales y ni una sola victoria, como Memphis hace unos años. San Antonio Spurs empiezan a dar miedo y el relevo generacional se apuntala en base a Mills, Aldridge y un Leonard en plan líder. Los Clippers necesitan a Griffin (si bien Reddick metió el primer tiro ganador de su carrera, algo que extraña dado su nivel), sus compañeros han reventado, Thunder dan una de cal y otra de arena, con Westbrook en busca de una marca histórica, superar los 17 triples-dobles de Magic Johnson. Lo de los Grizzlies es un chiste, pero no tienen culpa, les lastran las lesiones, y aúna sí entrarán en play-offs, un milagro.
Entre unos Jazz muy regulares, unos Mavericks con Nowitzki de exhibición en exhibición, unos Blazers que buscan la sorpresa, y los Rockets que carburan ahora, se juegan un puesto de honor. En el Este, disputa entre Cavs (Lebron siembra su futuro de dudas y plantea un equipo con sus amigos Wade, Anthony y Paul) y Raptors por tener ventaja de campo, el puesto asegurado lo tienen en Boston, en Atlanta (enchufados a la hora de la verdad), en Charlotte, y en Miami con ese coloso llamado Whiteside que va a ganar billetes por un tubo el año que viene. Y por el premio de no irte a casa antes de tiempo, franquicias históricas como Chicago Bulls (que mala pinta tiene esto), Detroit Pistons (Drummond y sus palmeos en el último segundo), unos Indiana Pacers que siguen igual de grises pero firmes, o unos Washington Wizzards que se han despertado de la siesta justo a tiempo. Alicientes quedan, y son muchos, también nos queda por ver la última canasta de Kobe Bryant. ¿Será a pase de Marcelinho Huertas? Eso sería de traca.

Toni Castarnado
Toni Castarnado es un crítico musical que escribe también de manera puntual sobre cine y, ahora, deporte en Blisstopic. Es autor de los libros “Mujer y música: 144 discos que avalan esta relación” y de su segundo volumen, “Mujeres y música: 144 discos más que avalan esta relación”.Colomense de pro y residente en el Maresme, es colaborador casi desde sus inicios en Mondo Sonoro, y en cabeceras como Ruta 66 o Rock Zone. Escribe artículos para el blog La Ruta Norteamericana de El País, y ha hecho radio en varios medios, dirigiendo el espacio “Canvi de Ritme” en COM Radio, en el cual combinaba música y deporte. Por su grabadora han pasado un gran número de artistas; entre ellos, Arcade Fire, Antony & The Johnsons, Patti Smith, Marianne Faithfull, Mötley Crüe, Rammstein, Muse, The Black Keys, Tori Amos, Frank Black, Kings Of Leon o Mavis Staples.