SEFF' 2014
Crónica Vol. 2
Fotos SEFF
Los buenos augurios se confirman. A pesar del cambio de salas, el público ha vuelto a responder masivamente a una programación tan diversa como arriesgada en la undécima edición del SEFF. Y el festival, siempre tan inquieto, sigue creciendo también en otras propuestas que calan cada vez más hondo entre profesionales y curiosos: exposiciones como las de Martin Arnold o Daniel Cuberta, la master class del suizo Fernand Melgar, las mesas redondas sobre escritura cinematográfica con ponentes como Jorge Guerricaechevarría o Beatriz Sanchís, o los ya habituales saraos noctunos con conciertos y djs. ¿El palmarés? Fiel reflejo de su programación: ecléctico, resultón y con su puntito justo de riesgo.
Que Sevilla una vez al año y durante nueve días se torna un auténtico oasis cinéfilo nadie lo duda ya a estas alturas. Que un festival titánico como éste, en su afán de ofrecer tantas diferentes alternativas, alberga gratas sorpresas como momentos disparatados, tampoco. Un ejemplo: el jueves 13 se ponía en marcha la 4ª edición del Commercial Film Workshop, un evento que busca atraer rodajes de spots a la ciudad y que cuenta con un completísimo programa de conferencias y encuentros en torno a la Publicidad y el Cine. El momento delirante llegaba en el cóctel que ponía broche final a la jornada: la actuación, ejem, estelar y sorpresa de Los Del Río, que tras cantar solo y exclusivamente para los presentes “Sevilla tiene un color especial” (cómo no), se dedicaron a dejarse inmortalizar en mil y un selfies por los invitados para luego desaparecer haciendo mutis por el foro. En un entorno tan cinematográfico como el SEFF, uno se preguntaba qué diablos habría hecho Berlanga con una anécdota tan jugosa como ésta.
Claro que momentazos surrealistas aparte, el SEFF siguió brindando desde su ecuador cine de alto tonelaje, ése por el que vale la pena acudir a la cita año tras año. El mismo día que los autores del “Macarena” ponían en solfa el mundo de la creatividad, los degustadores de rarezas podían deleitarse con “White God”, oscurísima alegoría política disfrazada de vuelta de tuerca al canon Disney de animales humanizados y que se alzaría días después con el Premio Erimages a la Mejor Coproducción Europea.
Esa misma noche otro europudding, aunque bien diferente y con el toque nostálgico, compartía estrellato en el Maratón Grotesco Palomitero, locuelo ciclo de proyecciones de gran solera en la ciudad y que el SEFF ha tenido el buenísimo gusto de acoger en su seno tras la llegada de José Luis Cienfuegos como director. Hablamos de “Pánico en el Transiberiano”, una auténtica gozada para los aficionados al género, que pudieron disfrutar también en el mismo cartel de otro clásico del fantástico transalpino más despendolado, “Aquella casa al lado del cementerio”.
Sinceramente, entre tanto tertuliano de gafapasta y cine de qualité, se agradeció un par de sesiones tan desquiciadas como éstas, donde el público grita, insulta y jalea a su antojo, algunas veces con un ingenio que asusta. Y más aun si como aperitivo y entre medias de sesión y sesión, te cuelan conciertacos como el que se marcaron Termita y Desastre.
Termita Maratón
Con discursos bien lejos del planteamiento fantastique, se pudieron disfrutar en el tramo final del Festival dos de los filmes laureados en el palmarés: “Le meraviglie”, crónica entre el relato de iniciación y el fresco impresionista ambientado en una Toscana rural al borde de la desintegración y que supone la consolidación en el terreno de la ficción de una Alice Rohrwacher bregada en el campo del documental; y “Mr. Turner”, el biopic que Mike Leigh dedica al pintor William Turner evitando clichés y tópicos salvo, eso sí, ceder al actor Timothy Spall en la tradición del subgénero todo un personaje bigger than life.
Y si de conocer biografías se trataba, nada mejor que haberse dado una vuelta la tarde y noche del viernes 14 por el Teatro Alameda para zambullirse en los orígenes del, y perdón por la definición, nuevo cine andaluz. En las dos entregas proyectadas de “Generación Cinexín” descubrimos cómo una serie de cineastas de lo más granado se abrieron paso con poco dinero, mucho talento y más empeño: directores como Alberto Rodríguez, Santi Amodeo, Paco Baños, Jesús Ponce y Chiqui Carabante; actores como Paco León, Julián Villagrán, Alex O’Dogherty y Manolo Solo; técnicos como Alex Catalán, Daniel de Zayas y Daniel Sosa; productores como Gervasio Iglesias, Álvaro Alonso, Julio Sánchez y Mariano Agudo… El quién es quién del cine actual procedente de más debajo de Despeñaperros. Casi na.
Alberto Rodríguez
No sé qué nos dan de comer por aquí abajo, pero no solo de genio se vive, también de aguante. Y ese talante se apreció cada SEFF Noche: a nadie pareció importarle que los conciertos programados como alicientes extras comenzaran una vez terminada la última sesión del día, casi a la una de la madrugada. Así, tras la ingesta de celuloide, a partir de la hora de las brujas tocaba atracón de música, y pudimos comprobar –además de que Borja Cobeaga no solo sabe emular a Julie Andrews, ¡también a Jacko!- cómo se las gasta aun un viejecito entrañable como Simeon Coxe, dispuesto a seguir dando batallas (y no contar batallitas como hacen otros) como Silver Apples. El Manoel de Oliveira de los osciladores puso patas arriba una Sala X y la resaca, impresionante, se arrastró hasta el último día, en el que John Gray agitó de nuevo al personal destapándose como el nuevo wonder boy de la escena patria.
Silver Apples
Y ya que hablamos de maravillas, una última recomendación: “Turist”, del sueco Ruben Östlund (foto principal) y gran vencedora del certamen, una agudísima mirada entre la carcajada retorcida y el drama familiar con enjundia (“dramedy” lo llaman los yanquis tan prestos a las etiquetas). Un premio principal más que merecido para una gran película que se beneficia de un guión redondo, un escenario único, unas interpretaciones de lo más naturales y una habilidad sutil como un escalpelo, la de Östlund, para diseccionar las relaciones de pareja y el eterno conflicto de géneros.
Plas plas, pues, para el Jurado, de lo más atinado en una edición del SEFF, la undécima, de lo más memorable.
PALMARÉS SEVILLA FESTIVAL DE CINE EUROPEO 2014
Giraldillo de Oro: “Turist” (Suecia, Dinamarca, Noruega), de Ruben Östlund
Giraldillo de Plata: “The Kindergarten Teacher” (Israel, Francia), de Nadav Lapid
Premio Especial del Jurado: “The Wonders / Le Meraviglie” (Italia, Suiza, Alemania), de Alice Rohrwacher
Premio a la Mejor Dirección: “Mr. Turner” (Reino Unido), de Mike Leigh
Premio al Mejor Guión: “Turist” (Suecia, Dinamarca, Noruega), de Ruben Östlund
Premio al Mejor Actor: Timothy Spall, por “Mr. Turner” (Reino Unido).
Premio a la Mejor Dirección de Fotografía: Mikhail Krichman, por “Leviathan” (Rusia)
Premio a la Mejor Película en la Sección Las Nuevas Olas: “Las altas presiones” (España), de Ángel Santos
Segundo Premio de la Sección Las Nuevas Olas: “L’Abri” (Suiza), de Fernand Melgar
Mención Especial: “Los Hongos” (Colombia, Francia, Argentina, Alemania), de Óscar Ruiz Navia
Premio a la Mejor Película de la Sección Las Nuevas Olas, No Ficción: “Remine, el último movimiento obrero” (España), de Marcos Martínez Merino
Premio a la Mejor Película de la Sección Resistencias: “Equí y N’otru Tiempu” (España), de Ramón Lluís Bande
Premio Giradillo Junior: “Las aventuras del séptimo enanito / The 7th Dwarf” (Alemania), de Harald Siepermann
Gran Premio del Público: “El capital humano / Human Capital” (Italia), de Paolo Virzí
Premio Eurimages a la Mejor Coproducción Europea: “White God” (Hungría, Alemania, Suecia), de Kornél Mundruczó
Premio Marvin & Wayne al Mejor Cortometraje en la Sección Panorama Andaluz: “Oasis” (España), de Carmen Jiménez
VII Premio Europeo de Cine Universidad de Sevilla: “El nudista”, de Alejandro Philip Waudby
Premio ASECAN al Mejor Cortometraje de la Sección Panorama Andaluz: “Oasis” (España), de Carmen Jiménez
Mención Especial: “Tres Tristes Tigres” (España), de Bea Hohenleiter y Bruno Ojeda
Premio ASECAN a la Mejor Película de la Sección Oficial: “La Sapienza” (Italia, Francia), de Eugène Green
Mención Especial: “Mr. Turner” (Reino Unido), de Mike Leigh
Premio Ocaña a la Libertad: “Something Must Break” (Suecia), de Ester Martin Bergsmark

Tali Carreto
Siempre fui un adicto al lado oscuro: de renacuajo metido entre sábanas con linterna y libro pasé al peterpanismo de coleccionista compulsivo pre-síndrome de Diógenes. En mi CV puedo presumir de haber montado, en compañía de colegas ilustres, saraos como el Monkey Week y cabeceras como FREEk!, pero también, ojo, de tener el record mundial de visionados de “Tiburón”. Spielberg debería meterme en los créditos de la próxima edición en Blu-Ray, créanme. Además he trabajado en el maravilloso mundo de la comunicación en festivales tan dispares como los de Málaga o Berlín y con activos culturales tan diferentes como un documental narrado por DiCaprio o el debut de altos vuelos de Pájaro. No está mal para alguien que no sabe girar a la izquierda, como Zoolander.