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Low Ones and Sixes  

Low

Ones and Sixes

Sub Pop

7,7

Rock

Half Nelson

 

Después de tantos años, no vamos a renegar a estas alturas de Low porque en su undécimo disco de estudio se hayan atrevido a dar un minúsculo giro electrónico. Obviamente, no se han puesto cuadrar bombos ni a secuenciar barridos de frecuencias, pero la verdad es que las gélidas bases y fondos electrónicos de la inicial “Gentle” (también en la entrada de “Spanish Translation”) nos descolocan y nos sugieren que los de Duluth –después de probar con Jeff Tweedy en el anterior “The Invisible Way” (Sub Pop, 2013)– necesitan un productor que les ayude a reafirmar su personalidad y su talento (cosas que no han perdido) sin necesidad de apartarse de su sonido de cabecera. A la espera de su Brian Eno, cosa que pensándolo bien no sería tan descabellada, Low optan por el ingeniero BJ Burton (The Rosebuds, Megafaun…) en los April Base Studios de Justin Vernon (Bon Iver).

 

En un disco, como el anterior, demasiado pulido y amable se agradecen las guitarras (quedamente) rasgadas en la intensa (aunque algo difusa) “No Comprende” (sic) sobre las que la voz de Alan Sparhawk gana poco a poco intensidad hasta que Mimi Parker se le une en el estribillo. Nada nuevo, pero, una vez más, gloriosamente Low. En general, me convencen más los temas que canta Mimi Parker: es abrir la boca en “Congregation” (también con esquelético ritmo programado) y ya me dan ganas no sólo de ir a la iglesia si no de fundar mi propia confesión. Lo mismo pasa con la tremenda “The Innocents”, pese a que la línea rítmica programada es demasiado fría y le resta intensidad. En general, ese es el problema del disco: conocemos a Low y sabemos cuán intensos pueden llegar a ser (tanto en disco como en directo) y, por comparación, “Ones and Sixes” nos parece distante y a medio gas.

 

Low

 

Todo ello pese a los aciertos melódicos de “Kid in the Corner” y sobre todo “Lies”, un nuevo himno que seguro que en directo gana al eliminar el edulcorado fondo de teclado que pretende enaltecer la melodía. Aunque debo reconocer que el momento pop del LP, el equivalente al “Just Make It Stop” de su anterior LP, se lo lleva esta vez Alan con “What Part of Me”: tres minutos de pura golosina.

 

Afortunadamente, parecen recobrar su fiereza en la extensa (casi diez minutos) “Landslide” (cuyo sonido parece provenir de otras sesiones de grabación) donde las guitarras imponen su ley y nos ayudan a perdonar la insulsa “DJ” que cierra el LP con guitarras cristalinas.

 

Half Nelson

Crítico musical que ha visto multitud de modas y estilos nacer, crecer, multiplicarse y morir desde que empezara a colaborar en Ràdio Ciutat de Badalona en 1993. Fan del jazz y del pop británico, aunque todavía impactado por el drum’n’bass, su firma se ha visto prácticamente en todas las cabeceras de prensa independiente (Mondo Sonoro, Go Mag, Rockdelux, Suite, Trax/Beat…) y radio online (ScannerFM) y por su grabadora han pasado muchos de los grandes (Costello, Lowe, Hitchcock, Mills, Craig, May, Saunderson, Gelb, Calexico, Goldie, Size, Flaming Lips, Bon Iver…). También ha contribuido con varios capítulos a “Loops” (Mondadori, 2002) y a “Teen Spirit. de viaje por el pop independiente” (Mondadori, 2004).

 

half@blisstopic.com